Los meses de invierno pueden ser duros para tus audífonos. Aprende cómo protegerlos durante el invierno.
Bufff.... ¡qué frío hace fuera! Cuando las temperaturas bajan, no eres el único que siente frío. Tus audífonos también pueden verse afectados por él. Por ello, requieren un mantenimiento adicional durante los meses de invierno, para evitar que tengas que llevarlos a reparar.
Hemos recopilado algunos consejos para mantener tus audífonos protegidos durante el invierno.
Señales de que tus audífonos se han mojado
El verdadero enemigo de tus audífonos durante el invierno es la humedad y la condensación. Por eso es una buena idea revisarlos diariamente durante los fríos meses de invierno.
Algunas señales de que puede que haya humedad dentro de tus audífonos es la distorsión del sonido, sonido mermado, ruido de estática, tus audífonos se encienden y se apagan, y las baterías se agotan más rápido de lo normal. Estas señales pueden desaparecer ya que es posible que solo sucedan cuando los audífonos están húmedos.
Pero, cómo evitar que esto suceda. Lee nuestros mejores consejos aquí:
1. Mantén las baterías de tus audífono calientes y secas
El tiempo frío puede ser duro para las pilas de tus audífonos ya que les cuesta funcionar de forma adecuada a bajas temperaturas. El frío puede debilitar su calidad y acortar su vida útil. Lo mejor que puedes hacer es guardar las pilas a temperatura ambiente. Si llevas contigo pilas adicionales, intenta mantenerlas lo más calientes posible.
2. Seca tus audífonos por la noche
Igual que las gafas tienden a empañarse, los cambios de temperatura de calor a frío o lo opuesto puede crear condensación y humedad dentro de tus audífonos. Por tanto, es necesario abrir los portapilas de los audífonos por la noche para airear las pilas. También puedes usar una caja de secado o deshumidificador.
Asegúrate de secar todas las unidades del audífono concienzudamente, para que la humedad pueda evaporarse. Si tus audífonos son recargables, puedes usar un deshumidificador o un SmartCharger de Oticon, que tiene función de secado. Nunca uses un secador de pelo para secar tus audífonos ya que esto puede dañarlos de forma irreparable. En vez de eso, pide consejo a tu audioprotesista sobre la compra de un deshumidificador.
3. Utiliza una Oticon SafeLine™
Si te gusta ir a esquiar o una buena pelea de bolas de nieve, la SafeLine de Oticon puede ser una buena idea. Una SafeLine es un clip de audición que te ayuda a mantener tu audífono en su sitio sin importar lo rápidas o alocadas que sean tus actividades de invierno. De esta forma evitarás perder tus audífonos en la nieve, donde podrían dañarse.
4. Mantén tus oídos y audífonos calentitos
Las orejeras o un sombrero son una buena idea. No solo mantienen tus oídos calientes, también protegen tus audífonos de la lluvia y la nieve y de la acumulación de humedad, lo que puede provocar condensación dentro de los audífonos.
Un paraguas también puede ayudar a mantener secos tus audífonos si estás en la nieve o bajo la lluvia. Lo más importante que debes recordar es: ¡Los audífonos secos y calentitos son audífonos felices!
Si tienes problemas con tus audífonos, ponte en contacto con tu audiólogo protésico.
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